¿Qué es la piel?
Podemos considerar la piel como el órgano más pesado y extenso del organismo, cuya principal función es la de proporcionar aislamiento y protección al resto de los órganos (evita la pérdida de agua y de calor fundamentalmente), es por lo tanto imprescindible para la vida. Otras funciones muy importantes de la piel son: la protección mecánica (sirve como colchón para evitar el daño de los órganos internos), la protección contra la radiación ultravioleta (sin la piel, la exposición al sol sería letal), la protección frente a gérmenes.
Así mismo en la piel se producen determinadas sustancias, como la vitamina D, imprescindibles para el crecimiento y metabolismo del hueso. No debemos olvidar la función social de la piel: el sentido del tacto reside aquí, el olor corporal, y el concepto de belleza tiene mucho que ver con una piel sana.
La piel sí es el espejo del alma, la salud comienza en la piel.
¿Cómo es la piel?
La piel está compuesta por 3 capas bien diferenciadas:
La más superficial ó epidermis, aquí se encuentran las células que proporcionan la función barrera a la piel (queratinocitos), las que producen el color y son responsables del bronceado (melanocitos).
Capa media ó dermis, en ella se encuentra el "esqueleto" de la piel, es la que confiere la elasticidad, en ella están los vasos sanguíneos (arterias y venas) que nutren la piel y aquí reside el sentido del tacto (nervios).
Capa más profunda o hipodermis, también conocida cómo panículo adiposo. Es la grasa que nutre y protege de los traumatismos, de la pérdida de calor etc., es un verdadero colchón biológico.
¿Por qué se debe cuidar y limpiar la piel?
Aunque esto parece algo obvio, podemos señalar que básicamente la higiene cutánea persigue:
Eliminar las secreciones cutáneas: sudor, sebo,....y así evitar el mal olor.
Eliminar la suciedad ambiental (manchas, polución,...).
Prevenir las infecciones: la transmisión de muchas enfermedades se lleva a cabo a través del contacto persona-persona. Una piel limpia tiene muchos menos gérmenes por lo que las infecciones y el contagio de las mismas es menos probable.
Es importante: mantener las características de la piel intactas. Una higiene desmesurada y demasiado enérgica, así cómo el uso de productos de higiene y de limpieza inadecuados, puede irritar, eliminar las grasas naturales de la piel y por lo tanto favorecer las enfermedades cutáneas: infecciones e inflamación o dermatitis. En resumen, una excesiva frecuencia en los lavados no es garantía de salud.
¿Cada cuánto es recomendable limpiar la piel?
En principio, aunque parezca extraño, un enjabonado semanal sería suficiente para mantener una piel limpia y sana. La zona genital, manos, axilas, etc. necesitan higiene extra.
Es obvio que cada individuo siente su propia necesidad de higiene y no hay normas para esto (depende de la actividad física, características personales, cultura, etc.).
Tan importante como el enjabonado es un buen aclarado, pues los restos de jabón alcalinizan la piel y la resecan. Los baños demasiado calientes y prolongados también pueden dañar la piel, por lo que se recomienda ducha para el adulto o niño mayor y baños templados y menores de 15 minutos para los bebés y niños pequeños.
¿Cómo debe ser un cosmético?
Un producto cosmético tiene varios objetivos: limpiar la piel, embellecerla, protegerla y perfumarla. Además debe ser inocuo (no producir daño alguno), no irritante, eficaz (útil para lo que se ha destinado) y estéticamente aceptable (que no se note, que no tiña, con buen olor y que no deje restos)..
¿Cómo se debe cuidar la piel del niño?
Cada etapa de la vida se acompaña de un tipo de piel peculiar, la piel del niño es más delgada, más permeable y más frágil que la piel del adulto. El niño por lo general depende del adulto para su cuidado (alimentación, protección, etc.), un aspecto más es la higiene y el cuidado de la piel.
Ahora trataremos algunos aspectos destinados a realizar un correcto cuidado de la piel del niño.
Hablaremos del niño sano, sin dermatitis, ni otra patología. Esto lo trataremos en otros capítulos, y su pediatra o dermatólogo será el encargado valorar cada caso.
¿Cómo se debe cuidar la piel del recién nacido?
Un recién nacido sano precisa cuidados especiales, aunque no demasiado específicos. Señalamos a continuación lo más relevante:
Se debe evitar la pérdida de calor, abrigar al niño (no demasiado y con sentido común), bastará para ello. Evitar temperaturas extremas y ropas de fibras sintéticas. Se prefieren las prendas de algodón y de hilo para áreas en contacto con la piel.
El cuidado de la región umbilical es importante en los primeros días de vida, los restos del cordón umbilical se momifican y caen en 7 a 10 días. Sigan los consejos del pediatra o matrona, su experiencia y oficio le ayudaran siempre.
El baño puede realizarse desde el primer día. Un baño corto, templado bastará para la higiene del bebé y para estrechar los lazos afectivos. El baño debe ser una fiesta en la que participe toda la familia papá, mamá (si no está muy cansada) y el-los hermanitos, si los hubiera. Un consejo: los niños que cuidan o colaboran en el cuidado de sus hermanitos menores suelen vivir mejor eso terribles celos
El jabón elegido debe ser un syndet, un aceite de baño o un gel de avena, pues son lo menos irritantes y más fisiológicos .
La piel del recién nacido puede estar agrietada o descamar en algunas zonas. No debe ser motivo de alarma una descamación fina en manos, pies, cuero cabelludo (costra láctea).
Una crema hidratante o un aceite convencionales pueden solucionar el problema. Un consejo: aplicarlos por la noche y evitar las manos y región peribucal, pues pueden ser ingeridos por el bebé.
Las uñas pueden ser cortadas desde los primeros días. No hay que apurar y siempre cortarlas rectas. Muchos recién nacidos pueden lastimarse con sus uñas, córtelas con cuidado o compre unas manoplas especiales hasta que se atreva, con mi primer hijo fue a los 15 o 20 días, con el segundo lo hice en la maternidad.
Otra cosa, la sabiduría popular aconsejaba que la primera vez que se cortaban las uñas al bebé lo hicieran detrás de una puerta, esto garantizaba un "don" o una habilidad al niño....ustedes juzguen.
El pelo: es absolutamente falso que al cortar o rapar el cabello éste crezca más fuerte, por lo que no están justificadas las "podas radicales" a las que se someten tantos bebés.
Fuente: Saludalia
Cui-den Su-Piel..........
ResponderBorrarasi como nuestro cabello o nuestras manos!
Muy buen aporte. La salud de los recién nacidos es una prioridad del Sistema Sanitario y por tanto esta especialidad está muy bien valorada y cuenta con mucho futuro dentro de la Sanidad.
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