16.4.10

Los niños índigo

El término niños índigo es utilizado en el contexto de la llamada "Corriente de la Nueva Era" o New Age para referirse a aquellos niños que supuestamente representarían un estado superior de la evolución humana. Quienes defienden esta hipótesis señalan dicha evolución como un avance espiritual, ético y mental, sin atender a la definición que diera el científico Charles Darwin (mutación y selección por supervivencia del más apto).

Fuera de la New Age, este fenómeno es considerado un mito que carece de evidencia científica aceptable. La creencia en la existencia de niños índigo se asocia habitualmente a reacciones paternales que surgen frente a la pedagogía y psiquiatría modernas. Una de las causas observadas más frecuentemente, es el pánico moral que surge en los padres al tener que enfrentar una terapia psiquiátrica medicamentosa para sus niños. También el detonante podría derivarse del rechazo a diagnósticos de psicopatologías polémicas o de nuevo cuño, cuando éstas son adjudicadas a los hijos; especialmente de casos como la hiperactividad, el autismo y el síndrome de déficit atencional.

Según sea la corriente a que adhieran los seguidores de la New Age, así serán los atributos y la naturaleza que se describe de los niños índigo. Hay quienes sostienen que estos niños poseerían habilidades paranormales tales como la telepatía o la capacidad de leer la mente, mientras que los más moderados, afirman que lo que diferencia a un niño índigo de uno que no lo es son rasgos más convencionales, como una mayor capacidad de empatía o una creatividad incrementada. El término "índigo" referido cromáticamente, surge de la creencia de que estos niños tendrían un aura que sería del mencionado tono de azul.
 Orígenes

El término compuesto "niños índigo", se origina en el libro del año 1982 "Understanding Your Life Through Color" (Comprendiendo tu vida a través del color) de Nancy Ann Tappe, una autoproclamada psíquica y sinestésica que afirma poseer la habilidad de percibir el aura de las personas. Según sus escritos, comenzó a notar que muchos niños estaban naciendo con auras de color índigo hacia finales de la década de 1970. A principios del siglo XXI, Tappe afirma que el 97% de los niños menores de diez años y el 70% de los que tienen entre 15 y 25 son "índigo". Hasta ahora no existen estudios científicos que puedan corroborar esos dichos.


La idea de los niños índigo fue más tarde popularizada por el libro de 1998 "The Indigo Children: The New Kids Have Arrived (Los niños índigo: los nuevos chicos han llegado)", escrito por el matrimonio y equipo formado por Lee Carroll y Jan Tober. Carroll insiste en que el concepto se obtuvo a través de las conversaciones telepáticas con un extraterrestre o "energía maestra angelical" a la que él denomina Kryon.


Características


Según los seguidores del movimiento "Nueva Era", los niños índigo poseen características1 tales como una mayor intuición, espontaneidad, rechazo a una moralidad estricta y una gran imaginación, añadiéndose frecuentemente también a tales capacidades ciertos dones paranormales, o poderes sobrenaturales como la telequinesis, la clarividencia,la Piroquinesis o la capacidad de sanación.


También se afirma que estos niños poseen un fuerte sentimiento para generar una diferencia significativa en el mundo, y se encuentran naturalmente inclinados a temas relacionados con la espiritualidad, el ocultismo y el esoterismo. Sin embargo estas afirmaciones quedan en el plano de lo hipotético, debido a que no ha sido posible corroborarlo por el método científico. Aun así existen personas que poseen amplios conocimientos esotéricos y dicen haber trabajado con niños de aura azul (índigos), asegurando que sus características son reales y existen variaciones de estas entre un niño y otro.2


La posibilidad de la existencia de "niños índigo" no es hoy aceptada por la pedagogía, la psiquiatría ni la psicología, dado que no se ha podido demostrar su existencia de modo concluyente. Expertos psiquiatras afirman que la New Age, debería producir evidencia empírica acerca de lo que sería la existencia de este tipo de niños.3


El psiquiatra especialista en niños Russell Barkley, sostiene que los diecisiete rasgos más comúnmente atribuidos a los niños índigo, son tan vagos que "podrían describir a la mayoría de la gente la mayor parte del tiempo", y refiere además que podríamos estar ante un fenómeno psicológico conocido como "efecto Forer". Se ha indicado también que etiquetar a un niño revoltoso como "índigo" podría retrasar el diagnóstico y el tratamiento que pudiera ayudarlo.


Algunos pedagogos y psiquiatras han señalado que la creciente ineptitud de los sistemas educativos para tratar la agresividad de algunos niños y niñas, podría haber forzado a algunos padres de niños diagnosticados como "hiperactivos", a acudir a los proponentes de estas teorías alternativas. Los padres de estos niños recibirían la atención y escucha que les serían negadas en las instituciones educativas y sanitarias.


De este modo, pedagogos y profesionales de la mente afirman que la existencia de los niños índigo se trataría en realidad de una reacción de "rebeldía" de los padres hacia sistemas educativos autoritarios que restringen las conductas expansivas del infante, que premian la pasividad y el conformismo, y que fustigan la creatividad.


Los más escépticos opinan que esta suerte de "superioridad" atribuida a los niños índigo es nociva para el desarrollo de los infantes hiperactivos, cuya necesidad más urgente es la de aprender a convivir con los demás, así como obtener atención y apoyo parentales y de su entorno. A esta variante de las supuestas propiedades de los niños índigo, algunos llegan a asimilarle componentes segregacionistas o discriminatorios.


Wikipedia

3 comentarios:

  1. Muchos saludos a mis buenos amigos y un beso por ser especiales!

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  2. Anónimo21.4.10

    Gracias!
    Te agradezco las notas,
    Fue de mucha utilidad.
    Edwin

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  3. Anónimo2.2.11

    Muy interesante!

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Gracias por tus opiniones y comentarios